Atardecer desde el Círculo de Bellas Artes. |
En la
calle de Alcalá, 42, en pleno centro de Madrid, se encuentra el edificio del
Círculo de Bellas Artes, entidad cultural privada sin ánimo de lucro fundada en
1880. En su séptima planta se encuentra una de las terrazas con mejores vistas
de todo Madrid.
Cómo
llegar.
Si se
está de visita turística por Madrid, es más que probable que pase andando por
delante de este edificio. Se encuentra en plena calle Alcalá, entre las paradas
de Metro de Banco de España y Sevilla, de la línea 2. Justo a su lado está el
edificio del Ministerio de Educación, en la acera de enfrente la Iglesia de San
José y el Instituto Cervantes, y avanzando por Alcalá, en su misma acera, nos
encontramos el edificio del Banco de España, en la Plaza de Cibeles, a la que
se asoma el que posiblemente sea el edifico más bonito de la capital: el
Palacio de Telecomunicaciones, también llamado desde hace poco Palacio de
Cibeles.
Palacio de Telecomunicaciones y fuente de Cibeles. |
Si se
opta por el autobús, hay infinidad de líneas que pasan por delante o por las cercanas
plazas de Cibeles o Sol.
Victoria alada. |
En la
recepción del edificio se pueden adquirir las entradas para subir a la terraza,
a la que se accede a través de un ascensor. Es antiguo, bastante lento y con
gran capacidad, así que si se va en verano, como fue nuestro caso, es
imprescindible el tradicional abanico para hacer más soportable el calor que se
respira en su interior.
El
horario es de lunes a jueves de 9 de la mañana a 2 de la madrugada, viernes de
09:00 a 02:00 y sábados y domingos de 11:00 a 02:30. La entrada normal cuesta
4€. Para comprobar las tarifas, ante posibles cambios, se puede consultar la
página http://www.circulobellasartes.com/azotea/
Minerva. |
Palacio de Telecomunicaciones iluminado. |
Nada
más abandonar el ascensor, descubrimos las espectaculares vistas. Hay dos zonas
de ambiente “chill out” para sentarse o tumbarse en hamacas o colchonetas y
disfrutar de alguna bebida, y otra con las mesas dispuestas para comer o cenar.
Si esto último es lo que deseamos hacer, es muy recomendable reservar con
bastante antelación, porque no dispone de mucho sitio y suele estar completo.
El menú no es demasiado caro (para ser el sitio que es) y además nos ahorramos
el precio de la entrada. En pleno verano, el calor a la hora de la comida puede
ser sofocante, a pesar de los nebulizadores que refrescan el ambiente. Pero es
una experiencia única cenar cuando el sol empieza a ponerse tras el edificio de
Telefónica y sabiéndose protegido por la estatua de la Minerva, diosa romana de
la sabiduría, las artes y la guerra, visible desde la calle.
Instituto Cervantes desde el Círculo de Bellas Artes. |
Torres de La Castellana desde la terraza del Círculo de Bellas Artes. |